LA SEXUALIDAD EN LA ADOLESCENCIA

La sexualidad es una dimensión de nuestra personalidad y tiene múltiples manifestaciones desde que nacemos hasta que morimos. De hecho, no es estática ya que varía en las diferentes etapas de nuestro desarrollo.
Tampoco se puede afirmar que todas las personas nos manifestamos sexualmente de la misma manera, por esa razón, no se deben establecer criterios rígidos respecto a lo que se considera "normal" o "anormal".

PARA EMPEZAR, CANTEMOS JUNTOS...

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¿Qué características del amor en la adolescencia reconoces en la canción?

EL ENAMORAMIENTO

El enamoramiento en la adolescencia, también llamado "limeranza", es una de las principales manifestaciones de la sexualida en esta etapa de la vida, a pesar de que los amores adolescentes por lo general son pasajeros.

Estar enamorado significa tener un interés y un sentimiento de afecto especial por otra persona, pudiendo o no ser correspondido. En algunos casos el amor adolescente no llega a concretarse en una relación, a ello se le llama "amor platónico".

No todos los adolescentes experimentan los mismos sentimientos ni con la misma intensidad. Generalmente a los chicos les atraen más los atributos físicos mientas que las chicas son más idealistas.

Segúramente te has dado cuenta que has empezado a sentir mayor curiosidad y atracción por el sexo opuesto, tal vez ya has experimentado la sensación de estar enamorado, no te averguences por ello ya que esta experiencia es propia de tu edad y forma parte de tu auto afirmación como persona.

No puedes decidir sentirte enamorado o no de alguien, pero lo que sí está en tus manos es elegir conformar una pareja y con quién vas a entablar una relación amorosa. Por otra parte, no te debes sentir mal si no tienes enamorado/a, recuerda que eso siempre será tu decisión.

LA MASTURBACIÓN

Generalmente durante la adolescencia se inicia la práctica masturbatoria que es la auto estimulación de algunas partes del cuerpo, principalmente los genitales, con la finalidad de sentir placer.

Tal vez hayas escuchado decir frases como "Los que se masturban mucho se vuelven locos", "Si te masturbas te saldrán pelos en las manos", "Si no te masturbas te saldrá acné", "Cuando te masturbas mucho te adelgazas", entre otras.

Estos son sólo mitos que no tienen ningún sustento científico y por ser repetidos de generación en generación se asumen como verdaderos. Sin embargo, se sabe que la masturbación es una práctica saludable que no produce daño físico ni mental, por el contrario, permite la auto exploración del cuerpo y el descubrimiento de sensaciones placenteras, por lo tanto, no debes sentirte atemorizado, avergonzado o culpable por hacerlo.

Sólo debes estar alerta si te das cuenta que el impulso por masturbarte te impide realizar otras actividades como estudiar, salir con amistades o compartir con tu familia.

Ten presente que nadie está obligado a realizar o no esta práctica, como siempre, la decisión es tuya.

LA PORNOGRAFÍA

Muchos/as adolescentes pueden sentirse atraídos/as por revisar material con contenido pornográfico, es decir, observar revistas, páginas de internet o películas donde se muestran imágenes o textos que presentan situaciones sexualmente explícitas en las que se resalta principalmente la parte genital con la finalidad de producir excitación desvinculada de la afectividad.

Es natural que tengas curiosidad por la pornografía sin embargo debes recordar que ésta representa una realidad distorcionada y exagerada la cual puede influir negativamente en tu concepción de la vivencia de la sexualidad.

La pornografía es básicamente un negocio y los/as adolescentes son considerados por estos comerciantes como clientes fáciles, por ello es importante que uses tu criterio si decides ver pornografía, teniendo siempre presente que no estás obligado a hacerlo si no quieres.

INICIACIÓN SEXUAL

La atracción sexual, la curiosidad, la presión de grupo, las fantasías sexuales o el enamoramiento te pueden llegar a sentir el deseo de experimentar sensaciones más intensas con tu pareja y producto de ello iniciarte sexualmente, eso quiere decir, tener relaciones coitales por primera vez.
Las razones para iniciarte sexualmente no pueden ser externas sino que deben partir de una decisión muy bien pensada y no solo producto del momento. Ten en cuenta que depende de ti decidir cuándo y con quién quieres vivir esa experiencia y no debes sentirte obligado u obligar a nadie a tener relaciones. Además es preciso que tengas siempre en mente las posibles consecuencias de tus actos, de las implicancias de estos en tu futuro y en el de tu pareja.